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Declaración de fe

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CREEMOS EN:

La inspiración verbal y completa por el Espíritu Santo de los autógrafos originales del Antiguo y Nuevo Testamento. La Biblia como única, suficiente, segura e inefable regla del conocimiento, fe y obediencia Salvadora y la inerrancia e infalibilidad en los escritos originales del canon. 2 Timoteo 3.16–17; Isaías 8:20; 2 Timoteo 3.16–17; 2 Pedro 1.21; Hechos 1:16

 

La existencia de Dios quien es Rey Soberano quien también está sobre todo lo conocido y desconocido, quien es Omnipresente, Omnipotente, Omnisciente y además de sus grandes atributos como único Dios también es una persona en la cual encontramos absoluta y contundente santidad. Hebreos 11:6; Daniel 2:28; Job 28:25-27; Hechos 14:17; 1 Reyes 8:27; Apocalipsis 5:13; Jeremías 23:24; Apocalipsis 19:6; Salmos 147:5; Juan 17:3; Apocalipsis 4:8

 

Cristo como único salvador preexistente y eterno, quien posee todos los atributos de Dios. Aun en su humanidad fue sin pecado y por su muerte propiciatoria y resurrección literal cubrió los pecados de los elegidos por los que intercede ante el Padre. Juan 14:6; Isaías 7:14; Miqueas 5:2; Colosenses 1:17; Juan 8:35; Juan 1:1; Juan 5:21; hebreos 2:17; Romanos 3:24-25; 1 Timoteo 2:5

 

El Espíritu Santo quien es una persona que integra la Trinidad y como tal posee toda la deidad y atributos de Dios. Convence de pecado, regenera, sella y habita en el creyente a quien bautiza concediéndole dones espirituales para la edificación de la iglesia. Juan 14:16; Génesis 1:26; Mateo 3:16; Hechos 5:3-4; Juan 16:8; Romanos 2:4; 2 Corintios 1:22; Efesios 1:13; Juan 14:17.

 

Los ángeles como seres espirituales creados por Dios quienes tienen poder, pero no poseen los “omnis” de Dios.

Los ángeles caídos son demonios que están sirviendo a Satanás, todos ellos ya están derrotados; sin embargo, el creyente debe resistirlos con la armadura de Dios. hebreos 1:14; Colosenses 1.16; 1 Pedro 3:22; 2 Pedro 2:11; Salmos 103:20; Mateo 24:36; Lucas 8:30; Mateo 25:41; Santiago 4:7

 

El hombre es un ser creado a imagen y semejanza de Dios quien posee alma eterna.

Fue creado inocente, sin embargo, por el pecado imputado de Adán su estado de inocencia cambio a: Culpable, Caído, condenado, separado de Dios y posee una naturaleza pecaminosa. Génesis 1:26-27; Mateo 10:28; Eclesiastés 12:7; Génesis 2:25; Romanos 5:12; Salmo 51:5; Romanos 3:19; Romanos 3:10; Romanos 3:23; Efesios 2:12; Salmo 58:3

 

El pecado es cualquier acción contraria a la naturaleza de Dios el cual fue introducido al universo por Satanás y transmitido a la raza humana a través de la caída federal de Adán, dando como resultado muerte física, espiritual y eterna a todos los humanos. 1 Juan 3:4; Deuteronomio 9.7; Isaías 14.12–15; Romanos 5.12; Génesis 3:19.

La salvación se recibe personalmente creyendo en Cristo quien expió nuestros pecados, otorgándonos a todos los creyentes una justificación que no merecíamos ni podíamos ganar a través de las buenas obras.

El creyente salvo goza de justificación, santificación, adopción, sello del Espíritu Santo y regeneración. Marcos 16:16; Juan 1:29; 1 Tesalonicenses 1:10; Hechos 13:39; Juan 5:24; Gálatas 3:11; Efesios 3:12; Efesios 1:13-14; Efesios 2:1

La iglesia es cuerpo de Cristo la cual comenzó en pentecostés y es la novia de Cristo. Tiene la misión de evangelizar, predicar, alabar, ministrar y discipular.

La iglesia es universal y local, es llamada a cumplir las dos ordenanzas enseñadas en las escrituras, el bautismo y la cena del Señor. Romanos 12:5; 1 Corintios 10:17; Hechos 1:15; Hechos 2:41; Efesios 5:25-27; 2 Corintios 11:2; Mateo 28:18-20; Romanos 6:3-4; Lucas 22:19

El inminente arrebatamiento de la Iglesia el cual dará inicio a un periodo de tribulación y gran tribulación en la tierra.

En la segunda venida de Cristo con la iglesia la cual dará lugar al comienzo del reino milenial.

En la resurrección de los impíos los cuales serán juzgados y echados al lago de fuego.

1 Corintios 15:50-52; Juan 14:1-3; 1 Tesalonicenses 1:10; Mateo 24:15-30; 2 Tesalonicenses 2:3-4; Apocalipsis 12:9; Apocalipsis 1:7; Apocalipsis 20:1-3; Apocalipsis 20:5

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